iclo repetido y contra corriente de hechos que se repiten, sin dejar huella, sin mostrar más allá de un fin. Me asfixia el aburrimiento, me harta, me cabrea!!!.Sigo caminando, mis pies andan, no tienen prisa se saben el camino, mi aburrimiento les hace ser lentos. El olor a calle es el mismo, los mismos baches, las mismas caras de todos los días. Caras aburridas, que no me dicen nada, que no me aportan.
Las calles reordenadas para indicar el camino, no hay sorpresas, no hay un cambio, nadie me espera, me recibo a mi misma en un vacío, hogar frío de sentimientos, llevo horas fuera, vuelvo y todo sigue igual, no hay orden, no hay luz, las persianas continúan bajadas, la cama sigue sin ser hecha.
No hay olor a comida esperando, me aburre pensar que tengo que comer sola, lo mismo, no hay asombro, sin poder contar mi aburrimiento a nadie, sin poder mirar a nadie que pueda contarme que se aburre.
Imagen paralizante de mi mundo que no me fascina, hago las mismas cosas, tiro la llave en el mismo platillo de siempre, me pongo cómoda, enciendo un cigarrillo, por añadir un riesgo más a mi vida, la nicotina, único cambio que percibo, como el tabaco se va consumiendo, y el humo se difumina en el aire, no se oye nada, no hay sobresalto, ni el viento hace señales, arrastro mi cuerpo hacia el sofá, donde acomodo el cuerpo, cansada, aburrida, pasiva.
Un plof plof plof, de la gota que se suelta de un grifo, pone música al silencio. Sufro una racha intermitente de sueño, busco al despertar un cambio, echo mano de mi adicto, tu si que me esperas portátil, como te vas quedando con el tiempo!!”, las teclas desgastadas de componer confesiones de mi vida, archivos que colecciono, donde los secretos se acomodan, se apilan, esperando en fila a ser borrados y olvidados, necesito sentir algo para escribir, lo que sea una minima sensación me hará crear algo, me envolverá en un mundo donde la vida es menos aburrida.
Querido compañero que me cargas de energía y me haces pensar que un mundo imaginario dirijo a mi antojo, y puedo llenar de sorpresas y finales incomprensibles, fascinantes, la locura me hará escribir una pesada irrealidad con pinceladas traumatizantes.
Viajo sin limites adonde yo quiero, puedo ser quien yo quiera, alcanzar la cima de la distracción, en un juego de palabras que crean fases que visten un folio aburrido y blando, donde voy cada minuto dándole una cara, una expresión, un sentido a una historia, donde el final depende del día y de mi aburrimiento.
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