La luz del universo, la luz de los ojos de quién se ama. Es el rincón de los sueños.
El objetivo de la cámara
martes, 15 de noviembre de 2011
Tropezar con las mismas brasas
Mentiría si te dijera que lo primitivo de mi ser ya no te desea. No te apartes del calor que desprendo. No pudo vencer a mis labios y necesitan que devores su figura y arranques el sabor de la timidez que rebosan.
Mentiría a cualquiera por saber callar a mi garganta y callar a la tuya. Cómo y por qué debo escapar a la pasión olvidada?. Voy a morir abrazada en la hoguera de mi alma. Si nuestros cuerpos se abrasan piel sobre piel.
Porque ahora, sabes mejor que antes. Y me salto los después llegando hacía ti sin nada de aire.
No puedo decir que no me rompí en pedazos. Y no supe volver a mi piel como antes, aunque llegue sacudida de ganas de enredarme. No puedo negar que mi rimel tiño la almohada. Y mi rostro se murió con la lluvia de un verano de gotas tristes.
Mentiría por besarte y negar la evidencia que mis ojos apartan y mi carne responde a las dudas. Y las entrañas me traicionan si te vas.
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